Juan Domingo Perón – De visita por Barracas

El próximo 17 de octubre se cumplirán 65 años del día en que una gran movilización obrera y sindical se agolpó en la Plaza de Mayo. Pedían a vivas voces la liberación del General Perón, quien se encontraba detenido en la Isla Martín García. El entonces presidente argentino, Edelmiro Farrell, había ordenado su detención como consecuencia de la actuación de Perón al frente de la Secretaria de Trabajo.

Aquella jornada histórica iba a marcar un antes y un después, incorporando al obrero en la vida política argentina y marcando el nacimiento del peronismo. El recuerdo de aquel 17 de octubre de 1945 fue conmemorado para siempre como “el día de la lealtad”.

Uno de los tantos encuentros de Peron y Quinquela. En esta oportunidad acompañados por “Evita” y el pintor Fernando Alvarez de Sotomayor en una Exposición de Arte Español.

El Teniente Coronel Juan Domingo Perón, fue una de las figuras más representativas de la política Argentina de todos los tiempos. Perón fue presidente de los argentinos durante 10 años, hasta que en su segundo mandato fue derrocado por la Revolución Libertadora del año 1955.

Con respecto a su gestión al frente de la presidencia, podemos destacar que varios aspectos sirvieron de plataforma para los años venideros. Entre ellos podemos mencionar, el haber dotado al trabajador de una conciencia distinta, al haberle atribuido los derechos y beneficios que le correspondían.
Otro de los aspectos a destacar, fue la preocupación por el desarrollo educativo y cultural.

Esta última cuestión es la que me lleva a recordar el paso de Juan D. Perón por nuestro querido Barracas.

En el año 1944, el entonces Ministro de Guerra y Secretario de Trabajo y Previsión, concurrió a la Escuela Nacional de Educación Técnica Fray Luis Beltrán, de la cual era director el profesor Raúl Audiffred.

Acerca de este hecho Don Enrique Puccia nos cuenta en su libro “Barracas, su historia y sus tradiciones” lo siguiente:
“El coronel Perón, acompañado por las autoridades del establecimiento, recorrió las distintas dependencias del mismo, observándolo todo con particular interés, y tras ello formuló encomiásticos conceptos con respecto al alto grado de enseñanza y de capacitación técnica que le había sido dable comprobar. Finalmente, dirigió un mensaje de salutación y de felicitación al cuerpo de profesores y a los jóvenes estudiantes reunidos en el patio mayor de la Escuela, agregando interesantes reflexiones acerca del orden y de la eficiencia alcanzada por ese importante establecimiento de enseñanza tecnológica, y expresando su confianza en cuanto ello representaba para el futuro de la Patria”.

Una nueva visita a nuestro barrio se produjo en el año 1973 durante su tercer mandato. En esa oportunidad, estuvo acompañado por su esposa María Estela Martínez y juntos visitaron el hogar del querido Benito Quinquela Martín. La casa se encontraba ubicada en la calle Suárez 1620 y es en aquel lugar de Barracas, donde el artista pasaría los últimos días de su vida.

Acerca de este famoso encuentro Puccia escribió:

“En esa oportunidad, los ilustres visitantes y el eximio artista, éste también acompañado por su esposa y otros allegados, platicaron amablemente largo rato. Instantes antes de retirarse las autoridades máximas del país de la casa del extraordinario cultor del arte pictórico, el primer mandatario obsequió a Quinquela con una réplica del sable corvo del Gran Libertador de América, el general D. José de San Martín; y el artista entregó a su vez al Teniente General Perón, un óleo que había terminado de plasmar en el lienzo y que tituló precisamente Entrada de Barracas”.

Nueve meses después de este último encuentro, el 1 de Julio del año 1974, Juan D. Perón falleció en la ciudad de Buenos Aires. A causa de su funeral, se decretaron varios días de duelo, y su cuerpo velado en el Congreso Nacional, fue visitado por más de 130 mil personas.

Diego Gonzalez

Archivo Histórico de Barracas